dejarte ir
sin caminos, sin veredas, sin destino
es asir el pasado y preñarlo de esperanzas sin alas, sin vuelos…
dejarte ir
sin senderos, sin pasos trazados, sin rutas
es transmutar mañanas por humeadas sombras…
que la muerte se disfraza en los adioses de promesas,
de “quién sabe” de “veremos”, de “quizás”
y es mentira que se instala entre los huecos de los huesos
fernando